Aun que no estaba en muy buenas condiciones, todos sus elementos funcionaban perfectamente y solo necesitaba un buen lijado y pintarlo.
Este es el estado en el que llego a casa.
Le he tenido que quitar la pintura con un depacante y darle un buen lijado con cepillo de alambre para eliminar la vieja pintura y el oxido.
Posteriormente una buena capa de imprimación antioxido y dos manos de pintura color beis clarito.
Una vez pintado lo he envejecido con un poco betún de judea.
Pero le faltaba una encimera y como tengo guardados unos cuantos palets he reciclado madera para realizarla.
Dos manos de barniz tinte, un poco de betún y finalmente un encerado.
Todo junto este es el resultado.